Pese al dolor causado por el abuso sexual, para Betty Rodríguez “siempre hay esperanza”

Pese al dolor causado por el abuso sexual, para Betty Rodríguez “siempre hay esperanza”

Betty Rodríguez es una mujer que decidió dedicar su vida a ayudar y a empoderar a otras mujeres. Tras un diagnóstico de cáncer de seno, ella decidió llevar a los suburbios de Nueva York un camión de mamografías para brindar a la población hispana la posibilidad de ser diagnosticada y tratada a tiempo. 

A lo largo de su vida, Betty no solo ha sido víctima del cáncer, a la edad de 12 años ella sufrió un episodio de abuso sexual por parte de su propio padre. No obstante, ella decidió dejar de ser víctima y convertirse en creadora.

Cuándo entendí lo que había pasado, me sentí miserable

Una noche, cuando tenía 12 años, Betty sintió que alguien la tocó y sintió un dolor inmenso que no sabía explicar. Ella no entendió qué había pasado ni quien le había hecho algo, al ir al baño se dio cuenta de que había sido su padre y muchos años después comprendió lo que realmente le pasó.

Además del dolor físico y de tener que afrontar un embarazo no deseado y a tan temprana edad, fueron muchas las heridas que le quedaron a Betty, ya que su padre, la persona a la que amaba y admiraba profundamente, fue quien destruyó su vida. Además, su madre la obligó a callar sobre lo que le había pasado, fue obligada a salir de su hogar para ir a vivir a un internado y casi pierde a su bebé porque fue forzada a regalarlo.

Más de cuatro décadas fueron necesarias para que Betty se atreviera a contar su historia y empezar su proceso de sanación y aún hoy, muchos años después, sigue trabajando para sanar las múltiples heridas que este abuso sexual dejó en su cuerpo y en su mente.

El secreto de la familia

Por muchos años la historia de abuso sexual de Betty fue el secreto de la familia. Hoy todavía recuerda que su madre le dijo: “no podemos decirle a nadie” y por esto mismo casi pierde a su hijo, ella recuerda como un milagro haber podido recuperarlo.

Recuerda que fue a brindar una ropa para bebé al hospital y puedo ver a un niño a través de una ventana, una monja le permitió ingresar y se percató de que en la manilla del pequeño estaba su nombre.

Ella decidió recuperar a su hijo y hoy lo ama profundamente y se siente muy orgullosa del ser humano maravilloso en que éste se convirtió. Aunque el camino no fue fácil ni tampoco contarle a él lo sucedido, su hijo fue muy importante en su decisión de no quedarse como una víctima de abuso sexual, sino convertirse en una creadora.

Un ser maravilloso al final del túnel

A pesar de todas las pruebas que ha tenido que afrontar Betty a lo largo de su vida y de las profundas heridas que ha sufrido, ella ha contado con la fortuna de encontrar amor, respeto, compasión y tolerancia en su esposo Samuel. Un ser humano maravilloso que la ha acompañado durante 38 años de su vida.

Pese a que tienen formas de ser opuestas, ellos han logrado construir una historia de amor y respeto juntos. Y él se convirtió en una esperanza para la vida de Betty.

Por eso, ella hoy no duda en decirles a quienes están sufriendo abuso y que no se han decidido a hablar que siempre hay una esperanza, y que es necesario levantarnos y querernos. 

Además, enfatiza en que es importante hablar para empezar a sanar: “No se queden callados, no se dejen derrumbar. Busquen a alguien que los pueda ayudar. Una forma de respetarnos es hablando”, señaló.

Víctimas sin voz

Tras la experiencia de abuso sexual de Betty, su familia tomó muchas decisiones sobre su vida sin siquiera consultarle. Ella era la persona afectada, pero no tenía voz. Por eso, nació el Movimiento #YoDigoNoMas para apoyar a quienes sienten que no pueden hablar, para ser la voz de quienes no la tienen, para ofrecer un espacio seguro para compartir su historia a quienes sufren en silencio.

Si un secreto está consumiendo tu vida, te invitamos a conocer el Movimiento #YoDigoNoMas, a compartir tu historia y a sumarte al movimiento para ayudar a miles de personas a reescribir su historia.

Si quieres ver el episodio completo, haz clic aquí.