Ley en Nueva York que protege a los adultos que fueron abusados en su niñez

Ley en Nueva York que protege a los adultos que fueron abusados en su niñez

Los sobrevivientes de abuso sexual en Nueva York ahora se encuentran amparados por una ley que entiende su proceso y no juzga su silencio. 

En el mundo se estima que cada año, mil millones de niños entre las edades de 2 y 17 años fueron víctimas de abuso y/o negligencia, según cifras de la OMS.  Esto equivale a 3 veces la población actual de Estados Unidos y si lo abordamos en su magnitud, es un problema que rebasa los límites nacionales e implica a millones de afectados que en su etapa adulta muy probablemente no cuenten con el acompañamiento necesario para sanar su dolor.

Sensaciones en los adultos luego del abuso sexual infantil

Este problema se convierte en una pandemia difícil de combatir, ya que los sobrevivientes se enfrentan a muchos desafíos que les impiden alzar la voz y reconocer de manera pública el abuso al que se vieron sometidos. Algunas de las sensaciones que persisten hasta la etapa adulta son:

Los sentimientos de culpabilidad: 

La mayoría de sobrevivientes asume que lo que les pasó tiene que ver con algo que ellos propiciaron o impulsaron y esto les genera una sensación de culpa. 

También en muchos casos se responsabilizan por no haber tenido las herramientas necesarias para poner un alto a la situación por la que estaban pasando cuando eran niños. 

Cabe resaltar que ningún sobreviviente es culpable de lo que le sucedió, la responsabilidad es únicamente del abusador que manipuló la situación a su favor.

Problemas para establecer relaciones afectivas: 

El abuso sexual infantil hace que las personas asuman las relaciones afectivas replicando las emociones de abandono, celos, sometimiento y el apego excesivo que el abuso les despertó. Para construir formas de relacionamiento diferentes y menos nocivas es necesario empezar una terapia con personas especializadas en el tema que puedan acompañar el proceso.

Problemas para establecer límites: 

Los límites también se ven comprometidos luego de un abuso sexual y las personas pueden tomar dos determinaciones, se convierten en sujetos drásticos que no permiten ningún tipo de vínculo con los otros o admiten todo tipo de violencia por parte de los demás.

Baja autoestima: 

El amor propio se ve fracturado luego del abuso, porque los sobrevivientes fueron usados y manipulados durante ese momento. Esto hace que se auto perciban como personas que carecen de valor y al silenciar su experiencia la sensación aumenta. 

Las consecuencias del trauma no desaparecen con los años, porque las heridas son muy profundas. Las sensaciones dolorosas e incómodas persisten hasta el momento en que se empieza un proceso de sanación, preferiblemente acompañado por un especialista.

Como agravante ante esta situación para los sobrevivientes resulta muy difícil hablar, aún en la adultez. Según cifras de Unwomen el 40% de las mujeres abusadas nunca le contará su historia a nadie debido a las sensaciones anteriormente mencionadas. 

Una ley para apoyar a los sobrevivientes de abuso sexual infantil

Intentando combatir esta realidad el 29 de enero de 2019 la ciudad de Nueva York aprobó la Ley de Víctimas Infantiles, (Child Victims Act) la cual permite a los sobrevivientes obtener justicia sin importar el momento en que hayan ocurrido los hechos. Esta ley extiende el estatuto de limitaciones para los sobrevivientes de abuso sexual infantil, ahora todos los sobrevivientes de abuso sexual infantil pueden denunciar hasta cumplir los 55 años, ahora tienen en cuenta la magnitud del problema del abuso sexual y comprenden los múltiples factores que obligan a alguien a guardar silencio hasta estar preparado para denunciar. 

Nueva York está ampliando su mirada desde el aspecto judicial y está modificando sus políticas para evitar revictimizar a los sobrevivientes, y que el peso de la justicia caiga sobre los abusadores. Otros Estados también están cambiando sus políticas para acoger a los sobrevivientes, juntos podremos poner fin a esta pandemia silenciosa.

Tú puedes hacer parte del cambio, súmate a este movimiento en nombre propio o de cientos de víctimas que no han logrado encontrar su voz para pronunciarse en contra de este flagelo.

Encuentra las múltiples opciones que tenemos para unirse al movimiento y alza tu voz.